COMUNICADO
16 de Enero de 2008
A un año del asesinato de Hrant Dink, periodista armenio en Turquia Buenos Aires- El Consejo Nacional Armenio de Sudamérica recuerda a la persona de Hrant Dink, distinguido periodista y ciudadano turco de origen armenio, asesinado en Estambul -Turquía- el 19 de enero de 2007. Dink, de 53 años, director del periódico Agos de Estambul, había sido juzgado en varias ocasiones por denunciar el genocidio de más de un millón y medio de armenios entre 1915 y 1923 perpetrado por el Estado turco. También había recibido amenazas de muerte de grupos ultranacionalistas turcos
Fue una de las voces más valientes e independientes en Turquía. Dio su vida por defender la libertad de expresión, de las minorías y los derechos humanos, en un país que fomenta conductas de violencia e intolerancia, y que tiene una actitud negacionista ante crímenes de lesa humanidad como el Genocidio Armenio.
Dink fue uno de los tantos intelectuales acusados de «insultar la identidad turca», como el Premio Nobel de Literatura Orhan Pamuk. Ambos habían sido condenados a una pena de prisión de seis meses en suspenso, imputados de haber transgredido el artículo 301 de la ley penal turca que castiga a quienes «denigren» la identidad de aquel país.
En virtud del mismo polémico artículo 301 del Código Penal Turco y reafirmando la política de censura en ese país, el 11 de Octubre de 2007 un tribunal declaró culpable al hijo de Hrant Dink, Arat Dink y al actual editor del periódico Agos, condenándolos a un año de cárcel por insultos a la «identidad turca» por publicar comentarios sobre el Genocidio Armenio.
La Unión Europea exigió a Turquía en numerosas ocasiones la derogación de este artículo por considerarlo una seria restricción a la libertad de expresión.
El Genocidio Armenio fue reconocido como tal a nivel internacional y por la República Argentina que hace un año declaró el 24 de Abril como «Día de acción por la tolerancia y el respeto entre los pueblos, en conmemoración al genocidio sufrido por el pueblo armenio» (Ley 26.199 promulgada el 11 de enero de 2007)
Dejar que la muerte de Hrant Dink como la de todas las víctimas de la intolerancia entre en el olvido, será seguir debilitando a la justicia; justicia que exigimos, al igual que el reconocimiento del Genocidio Armenio, como así también la condena para el accionar de los partidarios de la violencia, y la inmediata derogación del artículo 301 del Código Penal Turco, que representa una amenaza a los valores de democracia y del Estado de Derecho.