A 25 años de la masacre de Sumgait, exigimos justicia

El Consejo Nacional Armenio adhiere al pedido de justicia, repudiando un oscuro y nefasto hecho en la historia de la comunidad armenia en Azerbaiyán.

Hoy asistimos al vigésimoquinto aniversario del inicio de la masacre de cientos de armenios de la ciudad azerbaiyana de Sumgait, avaladas y respaldadas por el Estado de Azerbaiyán. Este pogromo fue parte del plan sistemático de limpieza étnica turco-azerí iniciado en 1915 y continuado durante todo el conflicto de Nagorno Karabagh.

Entre el 26 y el 28 de febrero de 1988 grupos paraestatales azeríes irrumpieron en hogares armenios de Sumgait. Además de la destrucción de todos sus bienes, las familias armenias fueron víctimas de vejaciones de todo tipo, violaciones y asesinatos. El horror para los armenios que vivían en Azerbaiyán no se agotó en esas jornadas, sino que se expandió rápidamente hacia otras ciudades y poblados de Azerbaiyán como su capital, Bakú, y Kirovabad.

Frente a los intentos de la República de Azerbaiyán de minimizar el hecho y de atribuirlo a manifestaciones espontáneas, debe recordarse que estos supuestos grupos improvisados contaban con información precisa de las direcciones de los pobladores armenios. Al mismo tiempo, las fuerzas de seguridad no sólo permitieron pasivamente las atrocidades, sino que en ocasiones prestaron su colaboración.

El resultado del terror ejercido desde el Estado provocó cientos de muertes y miles de heridos a la población civil armenia. Esta política resultó una medida efectiva de limpieza étnica, ya que para cientos de miles de armenios que vivían en Azerbaiyán la única posibilidad de sobrevivir a nuevos pogromos fue refugiarse en otros países, abandonando sus hogares y sus pertenencias. Su continuidad en la actualidad puede constatarse en la permanente violación del alto el fuego en la frontera con la República de Nagorno Karabagh, como provocación y en sintonía con el discurso belicista de sus autoridades.

Oportunamente, en estos días se cumple también el primer aniversario de que Ilham Aliyev, el presidente de Azerbaiyán, afirmara de manera categórica: “Nuestros principales enemigos son los armenios de todo el mundo”. En este escenario, para el Consejo Nacional Armenio de Sudamérica, el modo de recordar el pogromo de Sumgait es exigir que el Estado de Azerbaiyán reconozca lo sucedido, se responsabilice por sus violaciones a los Derechos Humanos y dé respuesta a las poblaciones desplazadas forzosamente que aún hoy se encuentran en el exilio.

 

Buenos Aires, 26 de Febrero de 2013