El Consejo Nacional Armenio de Sudamérica desea expresar su preocupación por el proceso disciplinario que lleva a cabo el Consejo de la Magistratura contra el Juez Federal Daniel Rafecas.
En este sentido, destacamos la labor fundamental que el Juez Rafecas ha desarrollado para el avance de los juicios por los crímenes de la última dictadura cívico militar en nuestro país, así como también su férreo compromiso para mantener viva la memoria de causas justas, tales como el Genocidio contra los armenios o el Holocausto judío.
Jueces como Rafecas amplían los estrechos márgenes de la dogmática existente en el proceso penal, incorporando aquellas nociones necesarias a fin de proveer justicia a las víctimas de crímenes de lesa humanidad y de genocidio. A su vez, sus incansables estudios hacen al progreso no solo de la ciencia del derecho, sino también de la sociología y la historia.
Escasos son los ejemplos, tanto en el Estado como en la Sociedad Civil, de ciudadanos que lleven a tal extremo de coherencia su accionar, conjugando la investigación académica con su tarea cotidiana.
Es por ello que consideramos que la labor señalada es demostrativa de una ética del ejercicio de la función judicial que bien debiera ser tenida en cuenta por el resto de los magistrados.